El enclave Bananero.
El enclave Bananero.
Desde inicios del XX la zona del caribe centroamericano es irrumpida por las grandes compañías bananeras norteamericanas, compañías como la United Fruit Company y Standard Fruit Company se apoderaron del paisaje atlántico de nuestros países.En 1899 es fundada la United Fruit Company la cual expande sus operaciones en Honduras a inicios del siglo XX, donde varios presidentes y dictadores le ceden varias concesiones. También era propietaria de la Tela Railroad Company, con la que obtuvo dos concesiones más.3. La Tela Railroad Company es conocida simplemente como «La Compañía», que sigue operando con la empresa trasnacional Chiquita Brands International; y obtuvo su nombre porque sus oficinas centrales estaban en el poblado costero de Tela en donde se estableció en 1912.
La clase obrera de las Bananeras.
Todas estas concesiones dadas a las trasnacionales crean sujetos sociales que serán actores de la vida económica y política. En el caso de los enclaves bananeros en Honduras se puede contabilizar para 1953 alrededor de 35,000 trabajadores en las plantaciones bananeras. Desde 1916 en la Cuyamel Fruit Company hubo una huelga de trabajadores que brilló por el silencio de la prensa de la época. En agosto de 1920 en la Vaccaro Bros. Co. los trabajadores se declararon en huelga reclamando mejoras salariales. El Gobierno declaró el estado de sitio en la zona, para septiembre los trabajadores se reincorporan a sus labores. En 1925 hay una huelga en las plantaciones de caña de la Cuyamel contando con el apoyo de los trabajadores de las otras compañías bananeras.
Maíz, arroz, frijoles eran parte del menú cotidiano que sostuvo energéticamente a las y los trabajadores que se oponían al régimen de explotación en la cual se encontraban.
Para 1930 en La Ceiba estalla una huelga que exigía mejoras en las condiciones de trabajo, como en otras ocasiones el gobierno declara el estado de sitio y reprime a los trabajadores. Las crudas condiciones laborales hacían que afloraran algunas luchas esporádicas en las zonas de enclaves bananeros. Poco a poco y a través de años de lucha en los enclaves se va madurando la conciencia de la clase trabajadora.
Las luchas obreras no paran durante la dictadura Caristia, aunque son reprimidas. En 1944 hay una gran manifestación en san Pedro Sula, la cual es tremendamente reprimida hasta convertirse en una masacre. La protesta estaba encaminada a denunciar los excesos de la dictadura exigiendo libertades democráticas. Durante la dictadura, liberales y comunistas eran asesinados y exiliados, la represión fue la antesala para que la huelga del 54 estallara con las magnitudes en que aconteció.